La vitamina D3 y la vitamina K2 son esenciales para mantener una buena salud general. La vitamina D3 juega un papel crucial en la absorción de calcio y fósforo, dos minerales vitales para la salud ósea. También contribuye a la función inmune y puede ayudar a prevenir enfermedades crónicas. La vitamina K2, por otro lado, es fundamental para la regulación del calcio en el cuerpo, asegurando que el calcio se deposite en los huesos y no en las arterias, lo que es importante para la salud cardiovascular.

Ambas vitaminas trabajan en conjunto para mantener un equilibrio adecuado en el cuerpo. Mientras que la vitamina D3 aumenta los niveles de calcio en la sangre, la vitamina K2 ayuda a dirigir el calcio a los lugares correctos, como los huesos y los dientes, evitando que se acumule en lugares no deseados como las arterias.

BENFICIOS

• Ayuda a mantener la densidad ósea al regular el calcio en el cuerpo y asegurarse de que se deposite en los huesos.
• Previene la calcificación arterial al dirigir el calcio hacia los huesos en lugar de las arterias, reduciendo el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
• Juega un papel crucial en la coagulación de la sangre, lo cual es vital para la cicatrización de heridas.
• Mejora la absorción de calcio y fósforo, minerales esenciales para mantener huesos y dientes fuertes.
• Apoya al sistema inmunológico, ayudando a proteger contra infecciones y enfermedades.
• Puede ayudar a reducir el riesgo de ciertas enfermedades crónicas, como la osteoporosis y enfermedades autoinmunes.